"Los universitarios aprendimos a trabajar con racionalidad, a hacer mucho con casi nada; anteriores administraciones de gobierno siempre escatimaron recursos para la Universidad Autónoma de Tlaxcala, casi todo lo hemos hecho con las uñas. La Universidad se ha manejado con recursos mínimos, que continúen las auditorias, lo único que van a encontrar en los fondos es pobreza inexplicable", sostuvo el Dr. Serafín Ortiz Ortiz, Rector de la Universidad Autónoma de Tlaxcala (UAT).
Ante los señalamientos vertidos sobre el supuesto uso de recursos para campañas electorales y la presunta manipulación de estudiantes para favorecer determinado proyecto político, el Rector de la UAT, en rueda de prensa, dejó en claro que la Universidad ha sido auditada en tres rubros diferentes: fondo de pensiones y jubilaciones, plan maestro de construcciones y la reciente auditoría iniciada por parte de la Auditoría Superior de la Federación.
"La Universidad aplica todos sus recursos, absolutamente todos los que tiene para sus objetivos superiores, que son particularmente el trabajo docente, la tutoría, la producción y generación de conocimiento y la gestión", matizó.
Además, afirmó que en esta Institución se ha hecho más con los menores recursos disponibles, "¿cómo hemos formado a tantos profesionistas?, casi sin ningún apoyo de los gobiernos locales, excluido el presente. Les quiero decir -agregó- que vamos a mostrar, cuando nos autorice la Auditoria Superior de la Federación, los resultados de todas las auditorias que nos han practicado, además hemos formado un comité interior que permanentemente vigila los recursos, además de que somos auditados por empresas externas".
Observó que hay quienes se sienten incómodos con el trabajo realizado en la Universidad, "aquí se forman intelectuales, aquí está la sociedad que discierne, la sociedad que se dedica a cultivar las ideas y el pensamiento, sería ingenuo para quienes le atribuyen a la Universidad y a sus autoridades que haya manipulación y manejo de intencionalidades con los jóvenes y los profesores, si son gente que se dedica a la reflexión y al estudio, entonces, es un agravio a los universitarios, decir que los estamos ideologizando. Quienes nos miran desde esta perspectiva, desde luego que lo único que desearían es gobernar un pueblo ignorante, un pueblo que no piense, porque es más fácil conducir a la ignorancia que a la sabiduría; sin embargo, vamos a luchar por que esta Universidad florezca y forme a más profesionistas".
El Dr. Serafín Ortiz Ortiz reiteró que el objetivo de la Universidad es formar intelectualidad, y aquellos que hablan mal de la Institución le temen a la intelectualidad y es un agravio decir que los universitarios son manipulables.
Insistió en que quienes piden auditar a la UAT ignoran los procesos de auditoría aplicados en la misma, "si lo desconocen ese no es problema de nuestra Universidad, año con año nos audita el Congreso, durante 2009 salimos sin observaciones y sin duda se auditará el 2010".
Ante los reporteros de los diferentes medios de comunicación, el Rector de la UAT recordó que "los universitarios aprendimos, primero a trabajar con racionalidad, a hacer mucho con casi nada. Hemos sentado tres criterios para la aplicación de los recursos: oportunidad en su aplicación, certeza en su destino y transparencia en su manejo, y así hemos caminado".
Por lo que respecta a la supuesta manipulación de estudiantes, el Dr. Serafín Ortiz aseveró que no hay un solo alumno que pueda decir que el Rector lo ha manipulado o coaccionado para que se defina por algún posicionamiento político.
"Sería una aberración de mi parte, sabemos que el voto es secreto, el efecto sería contradictorio, si obligo a alguien sería probable que votara en contra, por la pura sensibilidad del ser humano; cómo voy a obligar a alguien a que en secreto haga algo que yo no puedo controlar. Eso parte de una ingenuidad".
Refirió que los espacios de la UAT son espacios abiertos a la sociedad de Tlaxcala, "un grupo de jóvenes que se dicen universitarios, aunque no los encuentro inscritos en ninguna facultad, me ha pedido, mediante oficio, que quieren hacer un debate aquí en la Universidad con los candidatos. Como no son estudiantes, no saben que los periodos de este curso ya concluyeron".
Hizo una exhortación para que el ciudadano haga un voto consciente y razonado, de acuerdo a sus convicciones. Manifestó que como universitario emitirá su voto por aquel candidato que asuma compromisos públicos de coadyuvar con el gran esfuerzo de los universitarios; que ayude a ampliar la oferta educativa para que más jóvenes, en edad de hacer una profesión, puedan hacer una carrera universitaria; con recursos, aumentando el presupuesto que el gobierno otorga; con apoyos para la investigación básica y aplicada; y que haga suyos los resultados de las investigaciones que la Universidad realiza, para después convertirlos en política pública.
Reiteró que su sufragio será por el candidato o candidata que ofrezca para la Universidad prosperidad, beneficios evidentes para los estudiantes, para sus profesores y trabajadores, con mejores salarios y su nivelación en orden de los ingresos que perciben sus similares en la región.
Minimizó los comentarios surgidos en la prensa: "en Tlaxcala, en una sociedad pequeña, estamos en una caja de cristal y todos miramos lo que estamos haciendo".
De igual forma, puntualizó que los universitarios desmontan otro mito que tiene que ver con el nacimiento de esta Institución: "la Universidad no fue producto del ingenio y voluntad de aquel político que hoy reivindican como el constructor de la nueva Tlaxcala. La Universidad creció al fragor del impulso de los jóvenes que necesitaban una universidad, de los profesores conscientes de que habiendo ya tres licenciaturas en el entonces Instituto de Estudios Superiores, necesitaban convertirlas en carreras universitarias y, desde luego, con la voluntad del gobierno federal".
Así nació la UAT -prosiguió- y desde entonces, de todos los gobiernos que siguieron, ninguno ayudó a la Universidad, con excepción del último de nuestros gobernantes, quien preside la administración en curso, quien ha ayudado de manera considerable porque es un universitario y preside un gobierno que es sensible a los problemas que aquejan a la Universidad.
Por eso -concluyó el Rector- la Universidad necesita de un marco de solidaridad, de gobiernos que la ayuden, la apoyen, la impulsen y la hagan un polo de desarrollo científico y tecnológico para la República.