En el marco de su 42 Aniversario, y con la aprobación de los integrantes del Honorable Consejo Universitario, máximo órgano de gobierno, la Universidad Autónoma de Tlaxcala (UAT) impuso el grado de Doctor Honoris Causa a Salvador Malo Álvarez, por sus aportaciones al ámbito de la educación superior en el país, así como por la construcción de una perspectiva de cambio que este sector necesita para avanzar en la transformación de la sociedad mexicana.

Esta Sesión Pública y Solemne, celebrada en las instalaciones del Teatro Universitario, se contó con la presencia de los ex rectores de la UAT: Dr. Héctor I. Ortiz Ortiz, C.P. Héctor Vázquez Galicia, Lic. Juan Méndez Vázquez, Ing. Alfredo Vázquez Galicia, Ing. René Grada Yautentzi, Dr. Víctor Job Paredes Cuahquentzi y Mtro. Rubén Reyes Córdoba.

Al dirigir su mensaje, el Rector, Dr. Luis González Placencia, indicó que, la Autónoma de Tlaxcala, ha sabido diferenciarse porque posee un modelo educativo integral, que se basa efectivamente en la transmisión de competencias para el desempeño profesional, que obvia en el legado humanista que, desde el medioevo, la universidad posee como parte de su existencia.

Agregó: “Hoy, que cumplimos estos 42 años, tenemos la certeza de que somos el cimiento de un edificio que queda aún por ser construido, uno que quiere ser más grande, en el compromiso de hacer realidad la obligación de garantizar el acceso a la educación superior de quienes aspiran a cursar una carrera en nuestra institución.

En su momento, el Dr. Salvador Malo Álvarez, agradeció la distinción que la Autónoma de Tlaxcala le otorga con este galardón, y expuso queobservar la evolución de la enseñanza en México es un regalo, y en este sentido, la UAT es el reflejo fiel de lo que ha pasado en la República, es decir, un crecimiento y desarrollo sostenido de calidad a lo largo de estas más de cuatro décadas.

Comentó que le gustaría tener esa respuesta a lo más importante: “Me refiero a que el énfasis está en los aprendizajes, no sólo en las enseñanzas, en cómo lograr que los jóvenes se den cuenta y que asuman la responsabilidad, ya que se trata de su educación, no la del profesor, no la de la universidad, no la de los amigos, sino de ellos, y que, si no hacen el esfuerzo para mejorar, nadie lo va a resolver”.

Comparte el boletín